Para mi propio placer...

domingo, 26 de diciembre de 2010

Seamos un tríangulo

Son pleonasmos cuando intentamos describir el enamoramiento.
No entiendo porqué ahora lo quieres hacer en fase de un triángulo, pero me gusta la imagen. Cada quién está en una esquina, y consecutivamente nos vamos alternando para ver quién es el el que lo maneja.
Entonces las puntas van "cambiando" de lugar. Maravilloso trío de poder. Incógnitas aún no resueltas a partir de los sexos, ánimos y participaciones.
Por lo pronto yo defino el tuyo y el mío; que es una historia que aún no ha tocado fin.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Corazón

Ha pasado mucho tiempo.... ahora te tengo en mis manos, después de tanto tiempo.
Te había dejado olvidado en algún cajón, ya no recuerdo cuál, ahora solo te miro y te doy tiernas caricias, pobre de ti, estás pálido.
La noción del tiempo escapó de mi, y te perdí, me fui a perseguir a alguien, y como puede predecirse me quedé sin nada. Volví desesperada a mi casa a encontrarte, batallé tanto... al parecer la llave la había donado y ese alguien la había tirado en algún lugar sin preocuparle nada más, mas que el simple hecho de deshacerse de ella; me perturba la idea de que la haya tirado, pero me perturba aún más el hecho de que no ese hecho no tuvo importancia para mi y fui atrás de él porque pensé que él era más importante. Lo más atónito fue que sentía tanto dolor... como si unas espadas te atravesaran y sangraras y sangraras.
Tu ausencia era tan grande que no me quedó más remedio que escuchar a mi cabeza, ahora la bendigo, y me ordenó detenerme para poder voltear la vista. Lo evidente no hace falta nombrarlo. Es paradójico haber sentido tanto dolor cuando me di la vuelta, ya que no estabas.
Regresé a casa... no se cuanto caminé pero llegué con los pies maltrechos. Con la poca fuerza que quedaba de mi rompí todas las cerraduras hasta finalmente llegar a ti.
Aquí estamos, los dos, juntos al fin, sé que eres mío y que perteneces a mi tórax, por fin lo entiendo, eres mi más grande tesoro. Pero antes de ponerte en tu lugar necesito cerrar y curar tus heridas, no me importa cuanto tiempo tarde, serás mi maestro de la paciencia, porqué tu más que nadie, conoces mi vida, qué, aunque sé que carezco de longevidad y todo lo que eso conlleva, puedo decir que cuentas con grandes cicatrices lo que habla de gran enseñanza.
Quizá posteriormente emerjan más, no sé porqué lo dudo, pero ten por sentado que no volverás a salir de mi.

domingo, 31 de octubre de 2010

Punto y aparte

Es increíble como los caminos pueden separarse tan rápido.
Pensar o intentar recordar todo el amor que algún día sentí por ti y ahora teniendo esta realidad de despedidas.
No necesitamos decir más o hacer más. Los actos hablan por si solos. Independencia y crecimiento es lo que nos espera.
Las circunstancias no las podemos controlar, pero si nuestro tiempo. No sé que siento por ti, eres ajeno a mi como yo lo soy para ti.

domingo, 24 de octubre de 2010

No me importa la repetición de mis palabras, ni la repetición de ideas de otras personas.
La luz se ha ido, vacío se encuentra el cuarto, somos dos yo.
Nos miramos con rabia, con un odio acumulado, culpando al otro de los sentimientos a sabiendas que no es así.
El origen está en nosotros, pero estoy muy cansada, la otra lo nota y se aventaja me golpea...
yo quisiera que me matara, no hay ningún sentido a esto, quiero huir, no enfrentar nada, estoy harta de todo, en cuanto mira mi actitud, se siente confundida, tenía tanta decisión que ahora está paralizada.
Estoy sola, y siempre he estado así, con la agonía en la puerta....

martes, 5 de octubre de 2010

Tu despedida

El día llegó, fue inevitable
estaba fríamente planeado
los utensilios preparados,
el cerillo, la hoja, el globo
al final el corazón.
Te miré por última vez
nuestros cuatro años
fueron una ráfaga
te pedí perdón por todo el mal
te odié por todas los llantos
que tendrías que saber que es por ti
por quien más he llorado.
He reclamado a la vida
por ponerte enfrente.
Grité por la frustración causada
He recordado tus acciones
esas que dices, que no fueron provocadas por ti.
Desee tu muerte.
Me provocaste arrancarte la vida.
El silencio.
Te quemaste lentamente,
tus cenizas caían.
Te cubrí lentamente y coloqué
(como en un buen funeral) unas rosas.
luego, até tu último recuerdo
al globo, me rehusé a soltarlo por un momento,
entendí que de cualquier manera,
aunque yo no te haya alejado,
estabas más lejos de lo que mis ojos podrían mirar.
Entonces, te solté.
Tardaste en irte.
Te contemplé.
Eras rojo.
Después, no logré divisarte.
Di la media vuelta, y
me fui.

Carta para un lejano amor

La carta antigua fue borrada, quizá error de tecnología, ya sabes que eso no es lo mío.
Fue por ti que me descubrí, ha sido un proceso muy doloroso, ese de auto-encontrarse, sobre todo por ese empuje de llevarme hasta mis últimos límites y consecuencias, para mostrarme de lo que soy capaz y hasta que grado puedo llegar.
No tuviste piedad, me enfrentaste con la vil verdad. Pero también me mostraste mi lado oculto ese que sutilmente se mostraba con otras personas, mi lado femenino, mi lado sensual, hurgaste entre mis entrañas, como el arte del movimiento de las serpientes. Sobre todo eso es lo que tengo que dejar ir. Nuestra compatibilidad en la cama.
Créeme que lo sé, que fueron los últimos versos que nos escribimos, estamos en puntos diferentes; ahora solo sé que te detesto, te detesto con todo mi ser, lee bien, no es odio, no es rencor, simplemente es el fin.
Así se viven los finales, sobre todo porque originamos a que éste fuera amargo. La bilis pronto pasará, mientras tanto sigue tu rumbo, como lo habías hecho, porque al parecer nos estorbábamos mutuamente.

viernes, 7 de mayo de 2010

Desde lejos ... con la confianza

Desde un teclado que no es el de origen, entonces, siguiendo la logica, tendré faltas de ortografia.
Me pides que te tenga confianza, eso no es lo que es...
Desde hace mucho sigo siguiendo los pasos de otra persona, porque me ha marcado por anos y no la puedo dejar ir. Aunque ayer me di cuenta que por mi bien y por el suyo la tengo que dejar ir.
Tengo mucho miedo, pero no me puedo dejar vencer por eso, porque entonces que sentido tendria la vida, si tiene alguno?
Donde esta el hilo conductor de esta historia? Donde esta eso que llamamos confiaza? En que se representa? Donde la busco? Si hace anos que la he perdido...

jueves, 25 de marzo de 2010

El presente


Tu presencia se volvió innecesaria/ pero tu recuerdo sigue latente
No recuerdo tus ojos/ pero llamo para recordar tu voz
Tuve que suplantar tus caricias/ me refugié en otros brazos
No hace falta que te diga lo evidente/ pero aún así lo sigo haciendo
Donde tú inteligencia imperaba/ queda la impulsividad de lo inesperado
Pero eso que no se olvida, eso que representa lo peor de la naturaleza humana... son los celos

domingo, 7 de febrero de 2010

Los ojos ya no lloran

El fin parecía acercarse, me rehusaba a verlo, a sentirlo. Creía en la esperanza del amor, creía que los sentimientos podrían ser más fuertes que cualquier océano.
Hoy, después de meses de lucha en contra de mis ideales y de exprimirme los ojos, me di cuenta que te habías ido; que nos dejamos ir.
Ya no lloro, las lagrimas se secaron. He guardado el corazón en un pequeño cofre para compartirlo conmigo, para contemplar las llagas que tiene; intentaré, con el tiempo, resucitarlo, lo mimaré, le cantaré para que vuelva a latir y veremos si, dentro de un tiempo pueda volver a vivir.

sábado, 30 de enero de 2010

Llorona

Me llamo Llorona...

Lejos de todo lo cercano, de todo eso que desde pequeños nos inculcan a amar y que nos dicen que debemos hacerlo. Lejos de todos con los que he crecido y amado y más lejos de ti. Nunca creí llegar a este punto.
Confieso que hoy tengo el corazón rajado, latente y sangrante. Te me fuiste de las manos, nos fuimos, nos dejamos perder, nos dejamos en el camino, ni tú quisiste seguirme ni yo a ti. Ahora la pasión invade las venas de ambos a un ritmo distinto.
Soñaba con mi regreso ahora sueño con mi dolor.